Me dijo la
Patria
Me dijo
que no existía
me dijo que
estaba muerta,
creí sus palabras
ciertas
y descubrí:
No mentía.
La Patria
en lodo vivía
y soñar la
hacía respirar
para volver
a empezar
a conjugar
nuevos verbos,
donde un
maestro sin serlo
la obligaba
a claudicar.
Las Amapolas
La sed de
la Septentrional
afecta hasta
su historia,
están muriendo
las glorias
las amapolas,
¡Ese grial!
A espalda
de lo estatal
la indiferencia
crece tanto
en ministros
que nom santos
que aquellos
paisajes verdes
hemos dejarles
de verles,
y todo
está bien, es cuanto.
Las Puertas
Las puertas
de Los Hidalgos
aún siguen
abiertas
para los
hijos de ésta.
Es este el
gran legado
que los
ancestros han dejado.
Anual deben
regresar,
dennles vueltas
a su lar,
no sea que
un externo
de lo
interno se haga dueño
y nos
roben nuestro hogar.
Contertulio
Hablaban cercano
a mi:
-El dinero
cuestionado
no es
igual que el trabajado,
por eso
afirmo aquí
vivo de lo
que aprendí.
El segundo
contertulio
confesó con
sumo orgullo:
-Estoy viviendo de un sueldo
-Estoy viviendo de un sueldo
pero no me
pagan ellos
me paga el
sudor que sudo.
