
En torno al tema, Fernández Lazala emitió los siguientes
conceptos:
“El actual proyecto de Ley de Partidos y Agrupaciones
Políticas que según Cristina Lizardo va a ser conocido nuevamente en el
Congreso, y que fue remitido por la Junta Central Electoral, es un proyecto
muerto por carecer de claridad y equilibrio constitucional.
“Coincido con el pensamiento de Euclídes Gutiérrez Féliz,
funcionario y dirigente del PLD, que se pronunció en el sentido de que la
iniciativa es un disparate por cuanto se traduce en un enunciado de
conceptos jurídicos que no se basta así mismo y no es claro ni precisoa, además
de que acusa carencia de elementos esenciales en su estructura que la
convierten, en caso de que se apruebe, en una ley muerta y con muy poca
incidencia jurídica.
“Ese proyecto de ley carece de procedimientos en su
ejecución y se deja a la interpretación o a la reglamentación
caprichosa de la Junta
Central Electoral y la competencia de los tribunales, en
la violación de los fraudes, delitos electorales y violaciones de las
altas dirigencias de los partidos, además de que se encuentra lleno de
vicios de nulidad.
“En el proyecto no se determina la calidad para
demandar y el régimen de prescripción de la acción se queda en el limbo
jurídico- El de sanciones es nulo y las pocas que existen son muy ambiguas
y benignas. La pieza tiene muchas deficiencias en la formación de los partidos
y agrupaciones políticas, normas y estatutos así como derechos y deberes
de los miembros; educación política, y campañas, patrimonio y financiamiento de
los partidos, entre otros aspectos”.