Washington.- El Ejército de Estados Unidos no descarta que
ocurra una III Guerra Mundial, según la visión de los conflictos armados
futuros que arrojó un informe del Departamento de Defensa, citado en el portal
digital Infowars.
El documento, Concepto de operación del Ejército (Army
operating concept), describe las estrategias para destruir a los potenciales
rivales geopolíticos y económicos que puedan obstaculizar los planes de
control global que se ha trazado Washington, señaló el artículo.
Para los estrategas militares "el carácter de los
conflictos armados" se verá influido principalmente por los "cambios
en el paisaje geopolítico" y por ejemplo, en caso de un enfrentamiento con
otra potencia nuclear lo que se propone es atacar primero y "de manera que
el adversario sea incapaz de responder con eficacia".
Mientras que en casos de naciones más pequeñas plantean la
ejecución de operaciones terrestres para reprimir la resistencia popular.
Tras más de una década de una denominada "guerra global
contra el terror", en el nuevo documento las organizaciones terroristas
internacionales parecen quedar un poco relegadas, para darle mayor importancia
a los llamados "poderes emergentes", refiriéndose a países como Rusia
y China.
También el informe alude a las "potencias
regionales", en relación a Irán que "persigue una modernización
integral de sus Fuerzas Armadas" y "tiene el potencial de
socavar los objetivos regionales" de Washington en el Medio Oriente.
El reporte da testimonio de una carrera militar donde son
puestas sobre el tapete las concepciones estratégicas que se preparan para
llevar a cabo una tercera conflagración mundial en un escenario de pesadilla. La
aplicación de esta doctrina de la guerra total es incompatible con los derechos
democráticos y el gobierno constitucional dentro de Estados Unidos, porque
implicaría también la represión de toda oposición política, así como de las
luchas sociales, insisten los autores del trabajo.
El reporte se presentó durante un evento anual del Ejército
en el que participaron altos oficiales y funcionarios del Departamento de
Defensa.