domingo, 10 de febrero de 2019

Elefantes y tentáculos


Por el Doctor José Pérez

Se ha dicho que no hay algo más triste que ver a un elefante cuando se encamina en dirección al lugar escogido para esperar su muerte. El enorme animal se dirige a un sitio conocido como Cementerio de Elefantes. Es conocido que los paquidermos son famosos por preferir lugares solitarios, escondidos, aislados; quizás algún profundo valle, donde realizan un gran esfuerzo para llegar, para entonces dar el postrero suspiro. Se sabe que el admirable esfuerzo es instintivo. En algunos países de África, lo mismo que en India e Indonesia, se han hallado cavernas con miles de cadáveres y esqueletos pertenecientes a los poderosos herbívoros, que por cientos de años ha usado esos sitios como tumbas, para hacer de allí su último descanso.

Los humanos, aunque somos omnívoros, somos principalmente carnívoros; y sentimos una gran simpatía por los elefantes; porque ellos, siendo herbívoros, se alimentan principalmente de ramas, raíces y hojas, no compitiendo con nosotros en la lucha por la obtención de alimentos. Incluso se ha notado que los grandes animales han sido utilizados para uso doméstico, como arar, cargar, empujar, y también han sido  empleados como montura. La población mundial de elefantes ha ido disminuyendo rápidamente en los últimos años, tanto debido a la invasión de su hábitat por el humano, como al exterminio de la especie mayormente por los sinvergüenzas europeos para diversión, pasarrato y también quitarles los colmillos que son de marfil, lo que es un valioso material.

Lo que provoca asombro y cierta pesadumbre es el imaginarse de cómo un animal tan fornido  como el elefante, sea capaz de intuir y reconocer el momento en que su día se aproxima, decidiendo aislarse para no causar molestias a los otros, cuando los lamentos y agonías de la muerte lleguen. De cómo ellos pueden entender que sus afilados colmillos y su corpulenta constitución ya no los podrán defender ante  la aproximación del final. Ni que jugar con lodo y agua, sus favoritos pasatiempos, podrán volverlos a refrescar y acariciar; así como tampoco rascar el cuerpo contra un árbol, para que les provoque gozo, o alivie su dolor. 

Aunque se tiene referencia del uso de los elefantes desde tiempos muy antiguos para las actividades bélicas, es a Aníbal el Cartaginés a quien principalmente se atribuye el uso de los enormes paquidermos como poderosas armas en el Frente de Batalla. Aníbal usó los poderosos animales en las numerosas guerras  que libró contra los romanos, donde los elefantes jugaron un papel determinante en muchas de sus victorias. La inigualable fuerza de los magníficos cuadrúpedos contribuyó a diezmar los poderosos ejércitos de los romanos, marcándose aquí el inicio de la decadencia del Imperio. Aún a pesar de la incalculable ayuda de los famosos elefantes, al final, Cartago cayó y fue borrada con sal.

La fuerza bruta, y el uso de avanzados armamentos nunca han triunfado en las guerras. Las guerras primero tienen que ser justas, y segundo tienen que contar con la participación de toda la población. Se han visto países con grandes y entrenados ejércitos invadir  o ultrajar otras naciones, pero al final, la Historia enseña que el dominio es sólo temporal; que la unión de resistencia de la población en pie es invencible, y que el patriotismo siempre triunfa. El caso de los alemanes, que las monarquías europeas y el Vaticano católico armaran para ir en contra de la Unión Soviética de Stalin es un ejemplo; como también lo es el triunfo de los vietnamitas contra los invasores Norteamericanos.

Para una Guerra ser justa debe de ser una Guerra de Liberación, o una Guerra para promover cambios económicos o sociales, las llamadas Guerras Revolucionarias de Nuevo Tipo, donde una clase social objeto de explotación, desplaza la otra que la explota. En las guerras de hoy, los ricos las inventan y proveen los recursos, pero entonces envían a los pobres para que peleen; los ricos mandan, pero no van. Los ricos obtienen ventajas de esas guerras; ellos adquieren poder y riquezas, mientras que los pobres proveen el cuerpo y mueren, dejando a sus familias en la miseria. Pero, por más fuerte que se empuje un columpio, nunca puede ir más allá del límite que le permiten las amarras. Los pobres tienen un límite para aguantar empujones y empellones; de ordinario, ese límite es el tiempo que les toma hallar una manera para arrancarse las ataduras.

En oposición a la sincera e inteligente actitud de los paquidermos, ciertos poderosos Tentáculos, cuando conocen que declinan, persisten en no reconocer que sus finales días de dominio y opresión se acaban. Fallan en reconocer que ya se les acabó el combustible. Que ya los oprimidos entendieron sus artimañas y los quieren despedir. Aun así, en su obsesión de mantenerse enarbolando su poderosa altanería, ellos logran arrastrar en su caída a cualquier patán que todavía insista en creer en ellos. Como el caballo cansino que pasta en el pedregal; por más que pasan los años, nunca aprende a galopar.

En tanto el servicio de los elefantes es altamente apreciado y hasta bienvenido; el de los Tentáculos es un servicio que sólo sirve para servirse de la servidumbre de los sirvientes que le sirven, por medio de explotar el Servilismo. El elefante es un animal que exige poco del humano, contentándose con que lo dejen vivir en paz, prefiriendo libres espacios, para vivir tranquilamente. Mientras que los Tentáculos atentan contra cualquier intento de los humanos para tantear sendas que traigan condiciones de paz e igualdad Ideando intrigas y maquiavélicos panoramas para mantener un hostil ambiente de violencia en la Sociedad y conteniendo las ansias de libertad y de vivir en tranquilidad.

Mientras que los Tentáculos promueven y fomentan el machismo, la arrogancia y la prepotencia en el humano, los elefantes reconocen una Matriarca como líder de su manada, no teniendo que pelearse por posiciones de privilegios y ventajosas. Con la experiencia del año 1965,en que los Tentáculos compraron y corrompieron a gobernantes lacayos de ciertos países para que se unieran y fueran en contra de la República Dominicana, no se pensaba que iba a haber tanta necedad y ceguera en los actuales lacayos gobernantes dominicanos para tener el talante de dejarse comprar y unirse con varios países para irse en contra de Venezuela, nación con la que nuestro país siempre ha tenido deudas de gratitud.

Una vez más se les olvidó a los infelices títeres controlados por los Tentáculos, que la parte que hoy se presenta como débil es precisamente la parte que día tras día adquiere dimensiones colosales, por reclamar lo justo, el derecho a ser libres; y por contar con el apoyo mundial, el apoyo moral. Los  ruines lacayos que una vez alguien llamara  “Mata Rally” son los mismos que hoy se alían con las fuerzas imperialistas, para tratar de inútilmente contener el “Rally” de emancipación, dignidad y honor emprendido en Latinoamérica, y que ruge como una imparable locomotora.

”Es la lucha entre lo Viejo, que se quiere quedar, y lo nuevo que se le impide entrar”. Hay una planificada intención para evitar que los dominicanos se enfoquen en los problemas que inciden en la vida de hoy.  Con tal propósito les inventan disparates como si fueran temas del día, como es el caso de las “Elecciones del 2020” y la relación entre dominicanos y haitianos. La satánica Prensa inicia la campaña, y en todo el país sólo se habla de ello. El calculado plan es tocar las “Teclas Emocionales” de la población para que se entretengan y bajen la guardia, y no se ocupen de lo que realmente importa.

Los dos capciosos Tópicos son mantenidos archivados por los Intereses para ser usados a su conveniencia. Cuando lo deciden, manejan para que la Prensa vendida y comprada lance la campaña propagandística. ¿Qué les importa a los dominicanos cuándo van a ser las “Elecciones”, ni quiénes van a ser los candidatos? Ya los dominicanos se imaginan que quien quiera que fuera el monigote, ni va a hacer cambios, ni va a enfrentarse a los Tentáculos, ni va a romper el círculo de dominio, corrupción, latifundismo, control religioso y violencia que azota la población.

La aburrida triquiñuela de los malandrines en el gobierno ya se ha usado demasiado. El propósito es que los Dominicanos volteen la cara y no miren hacia los reales problemas, como las violaciones de obispos y curas, la tenencia de la tierra, la corrupción, el tráfico de armas, el tráfico de drogas promovido por oficiales gubernamentales, la entrega del país a los intereses oligarcas capitalistas, y los crímenes, abusos y discriminación contra las mujeres; que son los verdaderos temas candentes en la Sociedad actual; los temas que debían ser tratados, para encontrarles soluciones.

Con ser tan enormes, los elefantes permiten que los humanos los monten y los usen como cabalgadura, convirtiéndose en el vehículo favorito para algunas comunidades en regiones alejadas. Los grandes paquidermos lo aceptan dócilmente y sin protestar. Por su parte, a los Tentáculos les gusta vivir montados en los países pobres, a los que no les permiten protestar aunque la carga les pese, obligándolos a aceptar dócilmente que los conviertan en monturas, para obligarlos a tomar la dirección que los Tentáculos decidan.

El descaro, desprecio y la arrogancia de los Tentáculos  es tan evidente que hasta nos enviaron  al país  un Embajador “pato”, para que como un Virrey impartiera las órdenes  a los dominicanos. Lo único fue que el depravado individuo convirtió la embajada en un Harén, donde los jóvenes de las privilegiadas y encumbradas familias eran invitados a perversas orgías. Se dice que en las parrandas, la “Niña Mariguana” y el otro polvo blanco que algunos llaman “Hielo” eran el “Menú del día”. La vagabunda Prensa del país nunca se refirió a esas linduras; como siempre de lambona y dedicada a la adoración del “Mandamás”

Las hembras elefantes paren un baby cada 5 años. Ellas mantienen su descendencia en el vientre por casi 2 años. Por la dedicación al cuidado de su descendencia, los elefantes están considerados como las mejores madres de todo el Reino Animal. Los Tentáculos mantienen las hembras humanas en el atraso, discriminadas y doblegadas, para limitarlas y controlarlas en el cuidados de sus hijos, a los que desde pequeñas edades embarran, con aberrantes creencias religiosas, para torcerles las mentes.
   
En algunas regiones de África e India usan los excrementos de los elefantes como combustible para mantener el fuego del fogón o, en las zonas muy frías, hacen llamaradas para producir calor que los abrigue de las bajas temperaturas. Los Tentáculos son famosos por ser incapaces de mantener calor o dar abrigo en los países que ellos exprimen; al contrario, ellos extirpan el último aliento de esos países, y los mantienen en la miseria, robándoles sus riquezas naturales y arrancándoles cualquier tipo de combustible, para dificultarles prender el fogón; saboteando cualquier avance que los pueda proteger del frío de la ignorancia.

La tristeza que se siente al ver los elefantes marchándose lentamente, emprendiendo su última jornada, se contrapondría con el júbilo de los países del mundo cuando los Tentáculos declinen, y dejen  de chuparles la sangre e intervenir en sus vidas. La sinceridad de los elefantes es admirable porque cuando saben que ya sus días terminan, se alejan hurañamente haciéndose a un lado. Los Tentáculos presienten que sus años de dominio se acaban, e intentan causar problemas, desconociendo el derecho que tienen las naciones del mundo a decidir su  futuro y a tratar de vivir en paz.

En aras de hacer cumplir una Regla que se instaló en el “Gallinero Latinoamericano” a través de lastimosos años, que establece que hay que pedir permiso al Gallo Pelón hasta para ir a la letrina, los Tentáculos hoy blanden el garrote para que esa Regla sea cumplida. Blanden el garrote y crean el “Cuarteto  Satánico”. Cuatro macabros ultra religiosos; el hombre de las cavernas Pence, el cadavérico Rubio, el burro canuto Bolton y el gordiflón Pompeo. Este Cuarteto quiere imponer la música en el planeta, para que todos bailemos, como marionetas. Viejos sueños de dominación mundial.

Los Tentáculos son famosos por vivir diciendo que ellos tienen la fortaleza de un elefante; usándola para  subyugar y atropellar al otro. Así han impedido que las naciones prosperen; sólo permitiendo que respire, a quien ellos decidan dar respiro; sosteniendo gobernantes limosneros; y tirándoles las limosnas al piso, para mirar cómo se agachan a recoger las mismas. Es con el uso de esas limosnas que los Tentáculos logran comprar y someter gobernantes, para que se ablanden ante la embestida del hegemón. Ese es el indigno  proceder de los tentáculos, para evitar que alguien se libere; ofreciendo dádivas y comprando caracteres.

Ante la vergonzosa actitud de ciertos mequetrefes, que han tratado de vender a Venezuela, pretendiendo que el torturador venga a castigarla con el garrote; perspectiva a la que evidentemente se han plegado, después que se entregaran al hegemón por unas cuantas monedas, sería interesante esperar a ver si la experiencia de  los últimos 50 años en nuestra área geopolítica  produjo alguna enseñanza. Está por verse si la población de Latinoamérica aprendió o no de las dictaduras Centroamericanas que asesinaron y desaparecieron a tantos miles; o si fueron en vano las luchas contra las dictaduras, que torturaron y se tragaron miles más en Suramérica. Y no sólo por el afán de poder y dinero, pero por el disparate de tratar de atajar el futuro.

Usar el eufemismo de tratar de contener el futuro, a través de suprimir a la gente del futuro, no es más que caer en el ridículo, para mantener la Sociedad en el pasado. La Ciencia, la Tecnología y las Leyes Socio-Económicas han demostrado que la Sociedad cambia, y con ella la mente del Hombre; que lo negativo del pasado no debe pasar al futuro; que todo se mantiene cambiando; cambio de todo, y cambio total. Que es así como se desarrolla la Sociedad del Humano, a través del cambio. Que así como el cambio es el reflejo del mundo, el mundo es el reflejo de cambios. Que si lo estético es algo que llama la atención por belleza y finura, lo estático es algo que llama la atención porque no cambia, y lo que no cambia desaparece, fenece.

Aunque los Tentáculos han tratado por todos los medios posibles, incluso recurriendo a las crueldades y la intolerancia, de mantener el mundo sin cambiar, ello es imposible, por la razón de que todo está cambiando  dentro y fuera de nosotros, quiérase o no. Nuestras mentes deben adaptarse a los cambios, porque de lo contrario se atrasan, mirando pasar los cambios que ruedan como desenfrenado tren, donde transitan las proezas del humano, catapultando la Sociedad hacia el futuro, mientras nosotros, estáticos, sólo miramos, sin participar.

Para que se vea como la Sociedad cambia delante de nuestras narices, un ejemplo criollo: Aunque produzca cierta náusea reconocerlo, la vida bajo la dictadura trujillista, fue mejor que la vida de la época Colonial, donde todo lo que se producía era enviado hacia las corruptas e impúdicas monarquías europeas, y donde imperaba la esclavitud. Esto nadie lo niega.

Entonces la vida de sinsabores, persecuciones e inquietud que provocó la dictadura ilustrada de Joaquín Balaguer fue mejor que el terrible amargor de vivir bajo la larga dictadura religioso-militar trujillista. Pero si se piensa en los aciagos días de la “Banda colorá”, aquél grupo de borrachones y criminales sin concepto creados por los balagueristas y la embajada norteamericana para perpetrar y producir temor e incertidumbre en la población, con los asesinatos de todos aquellos jóvenes líderes, que representaban la esperanza de cambio para la nación, entonces se podría  establecer sin temor a errar, que es mejor la vida de hoy en el país, aún con las desigualdades, la corrupción, y el actual dominio religioso-militar.

Cambio entonces seria hoy,  tratar de extirpar el pantano del entreguismo, el comercio del tráfico de armas, el Gran Negocio del tráfico de drogas, el control capitalista y saqueo de las riquezas naturales de nuestro pais, delante de las narices de los actuales peleles gobernantes, que no sólo traicionan los ideales de Duarte, Martí y Bolívar, sino  que desvergonzadamente respaldan a los que quieren guerras en nuestro Continente.

Los Tentáculos manejaron la propaganda por años, logrando ser percibidos más poderosos de lo que eran en la realidad. Pero hoy se demuestra que nunca fueron  tan poderosos y corpulentos como se les veía. Que nunca ayudaron, sino que se ayudaban. La fortaleza que decían poseer nunca se sustentó en la fuerza que da la razón. Los Tentáculos ensamblaron grupos de seguidores y admiradores, para que aplaudieran en el circo; poco convencidos, pero atraídos por el dinero, la moneda corruptora que vende países. Ahora los Tentáculos quieren apretar las amarras, para estrangular los países.

Lo que es innegable, y hasta aceptado por los más recios y rabiosos disfrutantes del dominio de los Tentáculos, es el reconocimiento de que donde quiera que los Tentáculos imperen y prevalecen, ellos traen consigo las armas, las religiones, las drogas, la violencia y la corrupción. Esos horrendos “Regalos” de los Tentáculos son los que ellos usan “para proteger sus intereses”. El interés y las aspiraciones de las naciones dominadas, vivir en paz y desarrollarse, jamás se toma en cuenta.

Veamos. Cuando los Tentáculos planificaron y efectuaron el asalto a Afganistán, inmediatamente los “Regalos” llovieron sobre aquel país como la lluvia de azufre que cayera sobre “Sodoma” y “Gomorra”, introduciendo los armamentos modernos; cómo se corrompen los oficiales del gobierno, y cómo, lo más importante, obtener más beneficios del negocio de las drogas. Dicho y hecho. Hoy, después de 19 apocalípticos años en guerra, aquél país está pisoteado, destruido, y es uno de los principales productores de drogas del mundo. “Regalo” del “Mundo Libre” propiciado por los Tentáculos.

Otro ejemplo, para mejor establecer nuestro punto, es el caso de un país llamado Colombia. Ese país está situado en la parte norte del subcontinente de Suramérica. Como todos los otros, este país cuenta con sus propias características idiosincrásicas, siendo una de ellas el que, desde que aparece un líder que se proyecte como alguien que podría realizar algún cambio político o económico, inmediatamente es asesinado. Allí asesinaron al Gran Mariscal José Antonio de Sucre, en el lugar llamado Cumaná; uno de los personajes más egregios que ha parido Latinoamérica.

Pues habiendo los llamados “Mágicos” del país de Colombia sido capaces de acumular enormes fortunas manufacturando y distribuyendo la substancia conocida como Cocaína, negocio mundial que destruye millones de vidas en todo el planeta; el negocio prosperó tanto que generó la envidia de los Tentáculos, quienes decidieron enviar la DEA para que se hiciera cargo del lucrativo negocio.

Hoy, el país es el principal productor, y exportador del mortífero polvo en todo el mundo; y los Tentáculos trajeron con ellos no sólo los “Regalos” de aumento de la prostitución, la violencia, la corrupción, la venta de armamentos y el control de los violadores Obispos sobre la población; pero también el planificado asesinato de toda aquella persona que “huela” a líder. Sólo entre 1916 y 1918, fueron asesinados 431 líderes sociales en aquel país. Todo esto más 9 grandes Bases militares para “proteger sus intereses” y promover el espionaje y la bravuconada en el Área.

Debe de ser establecido aquí, que si los hombres y mujeres que se levantaron en el 1965 hubieran logrado su propósito de dar prestigio, autoderminación y respeto a nuestro país, hoy hubiera Educación gratuita para todos, más y mejores hospitales, productos agrícolas en abundancia, industrias, menos muertos por la ingesta de alcohol, y hasta la Lotería Nacional fuera cosa del pasado. Este fue el crimen que hicieron en contra de nosotros, los jóvenes de aquellos días, robarnos el futuro, y obligarnos a vivir un mundo que no era el que nos correspondía. Jamás se lo perdonaremos.  

Esto es precisamente lo que los Tentáculos se proponen hoy con Venezuela; un país sumamente rico, con enormes recursos naturales al que los Tentáculos están tratando de estrangular económicamente, para aniquilarlo y robarles el futuro a los jóvenes. Sólo que los jóvenes venezolanos se han  propuesto unirse para cantar unas letras que a nosotros nos enseñaron a cantar, pero no nos permitieron poner en práctica: ”Ningún pueblo ser libre merece/si es esclavo, indolente y servil……”