Por José Manuel de
La parte Oeste de la
provincia de Puerto Plata apunta en ser víctima de algunas catástrofe naturales
que sin dudas son los cambios inesperados que la naturaleza viene presentando
hacen varios años.
Cuando pequeño salía
por los montes y la flora era tejida en estas pequeñas cadenas de montañas,
sabanas y playas de ríos formando bosques lleno de vidas silvestres, como la
variedad de aves; así mismo los ríos, arroyos y lagunas vivían llenos de agua.
Hoy en día estamos
encaminados en un mundo cambiante con la flora destruida, ríos, lagunas y lagos
secos y pozos subterráneos también agotados.
Hoy estamos
amenazados a un período extenso de sequía producto del aislamiento del fenómeno
El Niño.
Esto no quiere decir
que octubre y noviembre, febrero y marzo no dejen sentir las lluvias, pero esas
lluvias tan pronto lleguen al suelo se desplazarán por canales y ríos hacia el
mar. Las montañas que son creadas como tinajas de la naturaleza no sostendrán
el agua que desciendan de los cielos a causa de la deforestación.
Entonces tendremos
una tierra mas secas que las cenizas y ardiente como horno, implicaría eso
altas temperaturas y en consecuencia enfermedades repentinas, pero lo que más
atormentará será el agua de consumo en la población.
Señores autoridades
pensemos en la sobre vivencia de la humanidad, se hace obligatorio exigirle al
gobierno la construcción de pequeñas presas, represas de lagunas naturales que
contribuyen al equilibrio ecológico, así como establecer algunos reservorios
adecuados para el almacenamiento de agua con el fin de salvar ganados, gente y
todo tipo de vida, por tanto usted que lee o piensa igual que quien escribe le
exhorto a hacer su aporte aunque entienda que asunto nadie pone, un día
nuestras voces tendrán que ser escuchadas
