Managua.- El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, fue
reelegido este domingo por tercera vez consecutiva con una amplia ventaja en
unas elecciones sin observadores internacionales y cuyos resultados no serán
reconocidos por el principal bloque opositor, que no participó en el proceso.
El líder sandinista, que el próximo viernes cumplirá 71
años, es el virtual ganador, está vez junto a su influyente esposa Rosario
Murillo como vicepresidenta, en unos comicios en los que, según los primeros
datos oficiales, la participación alcanzó el 65,3 %, muy por encima al menos de
30 % calculado por la oposición.
De acuerdo a los resultados preliminares oficiales en base
al 21,3 % de las mesas escrutadas, Ortega obtenía 558.641 votos, equivalentes
al 71,3 % del total, mientras que su más cercano contendiente, el exdirigente
de la “Contra” Maximino Rodríguez, sumaba 128.495 votos, es decir, el 16,4 %.
La tendencia en favor de Ortega por esa amplísima diferencia
de puntos, que ya anunciaban las encuestas previas a la jornada comicial, hace
irreversible el resultado de la votación, según los analistas locales.
Previo a la lectura de los primeros resultados
provisionales, líderes del Frente Amplio Democrático (FAD), la principal
coalición opositora de Nicaragua, declararon que no reconocerán los resultados
de esta “farsa electoral y fraude constitucional”.
El principal bloque nicaragüense para estas elecciones era la Coalición Nacional
por la Democracia ,
que tras fallos de los poderes Electoral y Judicial que devinieron en su anulación,
se dividió en el FAD y Ciudadanos por la Libertad.
En una proclama, el FAD concluyó que más del 70 % de la
población a nivel nacional no ejerció el sufragio y de esa forma expresaron su
total “repudio al proyecto de partido único de Ortega y su familia”.
Exigieron además la celebración de elecciones libres y
transparentes, porque las de este domingo “son ilegales”.
El titular del Consejo Supremo Electoral (CSE), Roberto
Rivas, destacó sin embargo el “alto nivel de participación y de civismo”, con
un 65,3 % de los votantes empadronados.