
El niño lo tiene la abuela, que debe recorrer el trayecto
hasta cinco veces al día para que su madre lo alimente. A Lorenzo, el juez de
Instrucción Francisco Arias le impuso tres meses de prisión preventiva por
haber herido a otra mujer con un cuchillo.
La medida ha sido criticada por representantes de los
Derechos Humanos de Hato Mayor, que consideran que pudo haber dado una fianza o
prisión domiciliaria a la mujer para que pudiera alimentar y atender al recién
nacido. Cada mañana, y a cualquier hora, la prensa local se alimenta del drama
que vive la joven madre. Cuando va a amamantar a su hijo, Lorenzo, que lleva 15
días presa, es sacada de la celda de mujeres y llevada al salón frontal y
vigilada por una agente policial.
Abogados y el comité de los Derechos Humanos de Hato Mayor
buscan una revisión del caso para variar la medida que la mantiene en prisión.