
No obstante, advirtieron a las autoridades gubernamentales
que si en 30 días no cumplen con sus demandas, reanudarán su lucha.
El paro, que se inició el pasado lunes en demanda agua,
seguridad, arreglo de calles y carreteras, afectó las labores comerciales,
educativas y el transporte durante dos días.
A diferencia de otras manifestaciones, durante la jornada
huelgaría todo transcurre en relativa calma.
La jornada de lucha fue promovida por el Frente de Lucha
Unión y Progreso (FLUP), Frente Amplio de Lucha Popular (FALPO), y apoyada por
el sector empresarial y representantes locales de la iglesia católica.
Santiago Rodríguez, uno de los voceros del paro, dijo que
están cansados de que el Gobierno prometa y no cumpla con ninguna de las obras
demandadas.
Mientras que el sacerdote católico Javier Báez, de la
parroquia Santa Ana de Navarrete, declaró que respaldó el paro porqué considera
justa las reivindicaciones.
“Siempre y cuando sean pacíficas las demandas, yo estaré a
favor del pueblo”, declaró el religioso, quien fue el que presidió la
eucaristía que le puso fin a la protesta.
Luego de la marcha, el comercio abrió sus puertas, el
transporte público de pasajeros fue reanudado. Mientras que los centros
educativos reiniciaran la docencia este miércoles.