Washington.-Estados Unidos ha abierto una investigación
criminal sobre las filtraciones de los papeles de Panamá, que han destapado
miles de empresas y activos opacos de personalidades de todo el mundo, según
una carta del fiscal del distrito sur de Nueva York, Preet Bharara, publicada ayer.
En la carta, dirigida al Consorcio Internacional de
Periodistas de Investigación (ICIJ, en inglés), con sede en Washington y uno de
los artífices de las filtraciones, el fiscal Bharara informa de la apertura de
"una investigación criminal" sobre asuntos "relevantes"
vinculados a los papeles de Panamá.
Bharara solicita en la carta, publicada por la edición
estadounidense del diario The Guardian, poder mantener una reunión "tan
pronto como sea posible" con algún representante del ICIJ
"involucrado en el proyecto" de los papeles de Panamá para hablar
acerca de la investigación.
El escándalo de los papeles abarca más de 11,5 millones de
documentos del bufete panameño Mossack Fonseca, especializado en la gestión de
capitales en paraísos fiscales, y afecta a más de 140 políticos y altos
funcionarios de todo el planeta, entre ellos varios jefes o ex jefes de Estado,
o a sus familiares.
Cuando el escándalo estalló a comienzos de abril, el
presidente de EE.UU., Barack Obama, alertó contra el "gran problema
global" de la evasión de impuestos.
Según Obama, muchas de las operaciones en paraísos fiscales
que aparecen en los papeles de Panamá son "legales" y ese es
"precisamente el problema".
Mientras, el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco
Mundial (BM), la
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y la ONU han creado una plataforma
para intensificar su cooperación en la lucha contra la evasión fiscal.
Durante la asamblea de primavera del FMI y el BM de la
pasada semana, los líderes participantes reconocieron la urgencia de aumentar
la coordinación internacional en esta materia.
Además, el G20 (países emergentes y avanzados) incluyó en su
comunicado final, tras la reunión ministerial que celebró durante la reunión,
la necesidad de revelar y compartir la identidad de los propietarios reales de
sociedades en paraísos fiscales.