Santo Domingo.-El mensaje de las Siete Palabras pronunciado
hoy por la Iglesia
Católica con motivo del Viernes Santo, día en el cual se
conmemora la muerte de Jesús, deploró la situación de los hospitales del país,
la corrupción en el ejercicio político y la degradación de los valores cristianos.
En la primera palabra: “Padre, perdónalos, porque no saben
lo que hacen", el padre Ángel Sánchez pidió perdón por quienes ven la
política como un medio para enriquecerse.
Al pronunciar la segunda palabra del sermón, titulada “En verdad
te digo: Desde hoy estarás conmigo en el Paraíso”, el diácono Pedro Ramírez,
coordinador de la Zona
Pastoral de Herrera, se enfocó en que el pueblo dominicano no
solo debe escandalizarse por la corrupción en el manejo de los fondos del
Estado, sino por la corrupción de la conciencia y los falsos valores.
“Otros dicen que para ser mundo tiene que haber de todo,
pero en el fondo de sus conciencias, donde está la correcta razón, no admiten
los modelos de familia del mismo sexo”, dijo Ramírez. “Es preciso
anteponer los criterios morales cristianos a todo lo dañino que se infiltra en
la modernización de la sociedad, ya que eso no se ve a simple vista, si no a la
luz de la palabra de Dios que es quien desnuda al diablo disfrazado”.
Recordó a los católicos que estos no pueden apoyar programas
ni proyectos políticos que amenacen la vida humana, desde su concepción hasta
la muerte natural. Por lo que deben escoger una alternativa que les parezca
menos contraria a le ley natural, y más apta para favorecer la estabilidad
social y la convivencia.
Asimismo, en la tercera palabra la Iglesia Católica
expresó preocupación por la alta cifra de adolescentes embarazadas, cuyos hijos
corren el riesgo de nacer en hogares fragmentados.
También expresaron preocupación por la cantidad de mujeres
que han perdido la vida a mano de sus parejas.
La cuarta palabra: “Dios mío, Dios mío, por qué me has
abandonado”, fue pronunciada por el padre Federico Marcial Sánchez, de las
parroquias San Juan de la Cruz
y Nuestra Señora de la
Altagracia , de la zona pastoral de Villa Mella.
Sánchez deploró la falta de oportunidades que existen en el
país para ejercer un trabajo justo, además de las malversaciones que afectan el
desarrollo de la sociedad.
En tanto que la quinta palabra estuvo a cargo de Arturo
Pichardo, sacerdote de la parroquia Nuestra Señora del Sagrado Corazón, de la
zona pastoral central, quien en nombre de la Iglesia Católica ,
lamentó los altos índices de violencia que se registran en el país.
Llamó a la población a reflexionar sobre diversos versículos
de la biblia donde se destaca la sed de Jesús, sed que según indicó, no es
corporal, sino de justicia y de que se respete el derecho a la vida.
“Esta sed de vivir y de respeto a la vida se ve amenazada
frecuentemente con el crecimiento de la violencia en nuestro país”, expresó
Pichardo.
El párroco hizo un llamado a erradicar los actos de
violencia y la inseguridad para que se preserve la vida.
En la sexta palabra: “Todo se ha consumado”, el sacerdote
Carlos José Abréu, de la parroquia San Bartolomé, de Villa Consuelo, dijo que
“la sexta palabra de Jesucristo en la cruzse resume en que: que todo está
cumplido”.
Dijo que la sociedad dominicana debe cuestionarse si como
hijo, madre o padre está cumpliendo con su rol, dando amor y buenas costumbres.
El tradicional Sermón concluyó con la séptima palabra,
pronunciada por el padre Milcíades Florentino, párroco de la Iglesia Jesús de
Nazareno, de la base naval de las Fuerzas Armadas.
En este último mensaje la Iglesia deploró las condiciones del sistema de
salud dominicano, diciendo que “Jesús muere cada vez que a una persona no le
dan atención en un hospital por falta de cama”.
“Un sistema que legaliza la inmoralidad, mientras afirma que
no hay espacio para recibir en un hospital a un enfermo”, expresó Florentino.
Palabras del Sermón
El Sermón de las Siete Palabras, basado en las que
pronunciara Jesús durante su agonía en la cruz, es emitido tradicionalmente
cada año por la
Iglesia Católica. Por lo general, cada una de las palabras se
enfoca en deplorar los males que afectan a la sociedad.
Primera Palabra: Padre, perdónalos, porque no saben lo que
hacen. Fueron las primeras palabras de Jesús cuando fue clavado en la cruz.
Segunda Palabra: En verdad te digo, desde hoy estará conmigo
en el paraíso, fueron las palabras que Jesús le dijo al ladró arrepentido.
Tercera Palabra: Mujer ahí tienes a tu hijo e hijo ahí
tienes a tu madre.
Cuarta Palabra: Dios mío, Dios mío, por qué me has
abandonado.
Quinta Palabra: Tengo Sed.
Sexta Palabra: Todo se ha consumado.
Séptima y última palabra: Padre en tus manos encomiendo mi
espíritu. Estas fueron las últimas palabras pronunciadas por Jesús antes de
morir.