Por: Dr. José Pérez.- Cuando usted hable del lugar conocido como Los Hidalgos, en
la provincia Puerto Plata, República Dominicana; cuando usted se interese en la vida social de esa región del
país, necesariamente hay que mencionar al Profesor Francisco Rojas Zapata (Papo
Rojas).
Es bien sabido que el modo de producción y no los grandes
hombres, es lo que influye en el avance de las sociedades humanas. Sin embargo,
algunos hombres dedican toda su vida al bienestar, la educación y al progreso
de generaciones humanas y así se merecen la atención y el reconocimiento por
sus acciones.
Ser progresista es ayudar al avance cultural, educativo, político
y económico de una determinada comunidad humana. Es ir con los cambios
sociales; oponerse a las guerras injustas y perseguir la paz.
Ser progresista es oponerse a los vicios humanos y denunciar a los humanos que se benefician de esos vicios.
Ser progresista es oponerse a los vicios humanos y denunciar a los humanos que se benefician de esos vicios.
Cuando usted trate de analizar la vida de un humano,
usted va a encontrar que todo el mundo tiene su vida personal; que
respira, come, se baña, tiene sexo, camina, tose y estornuda como todos los
seres vivientes. Pero también esta el aspecto de que algunos humanos exceden, hacen
mas que adaptarse y parasitar en las sociedades humanas; ellos son altruistas,
insignes, firmes y determinados en sus pareceres.
Y aquí es donde encontramos el ejemplo de Papo Rojas, quien
desde jovencito entrego su existencia a la enseñanza y educación de
generaciones de jóvenes cerebros en nuestra comunidad, por largos anos sacrificando
su vida a enseñar al que no sabia; muchas veces olvidándose de sus propios
anhelos, sus sueños, sus propios intereses; manteniéndose contra vientos y
marea, como un guayacán. Y muchas veces tiene que morir para que la gente
aprecie la inmensa obra hecha a través de toda una vida.
Papo Rojas procedió de una familia de tendencia progresista.
Todo el mundo recuerda a don Rufo con cariño. Hombre de honor, dedicado a su
familia. Hombre sin temor a los cambios políticos y sociales. Hombre ejemplar
abierto al futuro, conocedor de que las nuevas generaciones son el futuro de la Raza Humana. A dona
Ana, mujer tranquila, educada, siempre protectora de su familia.
Esa fue la influencia de Papo Rojas, creador de hombres, sueños
y esperanza por una mejor sociedad, para poner a Quisqueya en los hombros de
generaciones preparadas, impregnadas de ideas fu turísticas.
77 anos dedicados al servicio de el país, eso es lo estamos
despidiendo hoy con nostalgia y con la genuina resolución de seguir su ejemplo
magisterial y su vocación de servicio.
Mis sinceras condolencias, junto a mi esposa Rafaelina y mis
hijos, para mi querida amiga Laly, Ursula,Thelma, Anahi, mi amigo Boni, Nonino
y Ricardo ,y para su esposa Gladys y sus hijos, que piensen que la vida de Papo
no fue una estrella fugaz; su vida fue una luz resplandeciente que ilumino
nuestra región con una de las ocupaciones mas honorables: la profesión de enseñar.