Salcedo.- Fue acribillado a balazos este jueves en la
noche un hombre que el 29 de agosto último había denunciado a través de un
popular programa en San Francisco de Macorís, que temía por su vida debido a
que era constantemente extorsionado por miembros de la Dirección Nacional
de Control de Drogas (DNCD).
La victima es Enrique Sánchez Taveras, de 37 años de edad,
quien recibió cuatro balazos cuando estaba en el interior de la Banca de Lotería SH, del
barrio El Hoyo, en la calle Hermanas Mirabal, numero 23.
De acuerdo al médico legista actuante en el caso, el doctor
José Lantigua, el Bory, como le decían a la víctima, recibió dos disparos con
entrada y salida en la parte superior de la espalda, uno en el cuello y otro en
la cabeza.
De acuerdo a una versión ofrecida por la joven Yadira del
Carmen Rodríguez con quien El Bory conversaba a la hora de recibir los
disparos, dos jóvenes llegaron en una motocicleta negra y sin decir ni
preguntar nada, hicieron los disparos y huyeron por la calle Restauración,
próximo al sector Rabo Duro.
El pasado viernes 29 de agosto, en el programa El Pulmón de la Democracia que conduce
y produce el comunicador Alex Díaz, en San Francisco de Macorís, el joven
Sánchez Taveras hizo fuertes acusaciones a un capitán adscrito a la DNCD en la zona y dijo temer
por su vida debido a que había dejado de vender la sustancia prohibida.
Sin embargo, según un video difundido la noche de este
jueves en dicho espacio de televisión, el cual fue grabado el pasado 28
de agosto del presente años, El Bory indicó que dejaba constancia, por si
lo asesinaban, de que había dejado de vender drogas ya que en
los últimos tiempos había que repartirle dinero a muchas personas en Salcedo, y
porque la ganancia que estaba obteniendo eran muy pocas.
Declaró que en los últimos días se sentía muy atemorizado
debido a que desde la DNCD
buscaban eliminarlo físicamente desde hacía varios meses, por lo que expresó
que si le pasaba algo, los culpables todos sabían quiénes eran y desde donde se
estaba fraguando su muerte.
De su lado, el padre de Enríquez, el comerciante
Zenón Sánchez Rosario, culpó de la muerte de su hijo a la Policía , aduciendo que
este tenía que entregarle cerca de 100 mil y hasta 2000 mil pesos cada semana
por concepto de la venta y distribución de drogas en Salcedo.