"La situación en la frontera está bajo control. La población puede estar tranquila, porque no existe ninguna amenaza para el desarrollo de sus actividades cotidianas en todo el país. La paz y la seguridad en República Dominicana están garantizadas”, aseguró el presidente.
En un mensaje a la nación transmitido por radio, televisión y redes sociales nacionales, planteó tres preguntas sobre la situación actual en la frontera con Haití: ¿Cómo hemos llegado hasta aquí?, ¿Por qué hemos tomado medidas?, y ¿Por qué mi viaje? a la Asamblea General de las Naciones Unidas esta semana ¿importante?
Respecto a la primera pregunta, el presidente respondió que en agosto de 2018, ciudadanos haitianos iniciaron la construcción unilateral de un sistema de riego, abastecido por las aguas del río Masacre, con el doble objetivo de regar grandes plantaciones y vender el agua a pequeños productores.
Sobre
las medidas que ha tomado el Gobierno, sostuvo que buscan garantizar la
seguridad y el interés nacional, así como proteger los ríos, medio ambiente y
producción agrícola de la República Dominicana.
Además,
agregó, para impedir que sequen nuestros ríos, que talen nuestros bosques o
extingan nuestra fauna. El precedente de una obra de riego construida de manera
unilateral puede conducir a una escalada de construcciones que acabarían con el
río.
“Ante
esta grave situación, que traspasa los propios límites del país vecino,
llegando a afectar de forma directa a nuestros intereses y nuestros legítimos
derechos, hemos entendido la necesidad de dar una respuesta contundente en
legítima defensa contra los grupos incontrolables que no obedecen al orden
constitucional haitiano ni reconocen los acuerdos bilaterales que rigen las
relaciones fronterizas entre ambas naciones”, aseveró Abinader.
En
relación con su viaje esta semana para participar en la Asamblea General de la
ONU, el presidente Abinader destacó en su alocución que el Gobierno dominicano
tiene la tarea permanente de seguir sensibilizando a la comunidad internacional
para que vaya en auxilio de Haití. “Por eso es importante mi viaje de esta
semana, porque la solución definitiva está allá y no aquí. El problema de Haití
ya no está en Haití, está en manos de la comunidad internacional”, insistió
Abinader.
El
gobernante recordó que en su primera comparecencia ante la Asamblea General de
la ONU en septiembre del 2021 se refirió a la situación de Haití y dijo que lo
repetirá ahora en su próxima intervención, haciendo énfasis en que no hay
solución dominicana al problema haitiano.
Insistió
en que a la República Dominicana no se le puede pedir más de lo que hace por el
vecino país. “Seguiremos siendo solidarios, pero sin olvidar que nuestra
principal responsabilidad es defender los intereses del pueblo dominicano. Así
lo hemos hecho siempre, así lo estamos haciendo, y tengan por seguro que así lo
seguiremos haciendo”, puntualizó Abinader.
El
jefe de Estado, enfatizó que la República Dominicana puede disponer de las
acciones necesarias que garanticen los derechos de la nación en el amparo de
las leyes y en línea con los acuerdos internacionales suscritos en materia
fronteriza.
Manifestó
que para defender el derecho que tiene la República Dominicana se tomaron una
serie de medidas como muestra de la firme decisión de impedir que se continúe
la construcción del canal sobre el río Masacre del lado de Haití.
“Como
muestra de la firme decisión de impedirlo suspendimos la entrega de visados;
prohibimos la entrada al país de los promotores del proyecto; cerramos la
frontera terrestre, aérea y marítima; instruimos reactivar la toma de agua de
la Vigía; ordenamos la construcción de la presa de don Miguel; y reforzamos la
presencia militar en toda la frontera. Las medidas estarán en vigor hasta tanto
consigamos la paralización definitiva del canal en construcción”, explicó el
mandatario.
Precisó
que no se trata de un conflicto entre los dos pueblos, tras considerar que a lo
que se enfrentan ambas naciones es a los incontrolables que mantienen la
inseguridad en Haití y que, por sus intereses particulares, ahora conspiran también
contra la estabilidad de su gobierno y la seguridad de nuestros recursos
hídricos.
“Lo
que han demostrado nuestros pueblos es el deseo de vivir en paz. No deseamos ni
buscamos una confrontación, pero sí estamos enfrentando a los incontrolables
que mantienen la inseguridad en Haití y que por sus intereses particulares
ahora conspiran también contra la estabilidad de su gobierno y la seguridad de
nuestros recursos hídricos”, enfatizó Abinader.
Abinader
advirtió que, si hay incontrolables en Haití, no serán incontrolables para los
intereses del gobierno dominicano.
Dijo que el pueblo haitiano está sufriendo las consecuencias de la inestabilidad e inseguridad generada por grupos insurgentes que han tomado el control de gran parte del país, desconociendo así la legalidad de su Gobierno y provocando una grave crisis institucional que mantiene a su pueblo inmerso en una terrible situación política y económica, que entendemos que en el nivel actual sólo puede resolverse con la ayuda de la comunidad internacional.