En los últimos días
hemos observado que el país viene siendo sacudido por una serie de eventos que
llaman la atención, pero cuando uno observa nada nuevo es, lo que pasa es, que
no queremos ser realistas de las circunstancias que se presentan en nuestra
convivencia.
Una delincuencia que
no le importa atacar al niño y al anciano, al rico o al pobre, al civil o al
militar, no tiene compasión de nadie. Siempre medidas y medidas y solución aún
ni la mitad deja a uno satisfecho.
Una Suprema Corte de
Justicia para colocar nuevos jueces, el escándalo fue tan fuerte que una mujer
de mucho mérito, jueza, aspirante a la posición de la Suprema quedó rechazada,
de aquí al tiempo que vamos se esperaba que la justicia iba a tomar un giro
como decir los expedientes que duermen y duermen en casación, como en los
tribunales del país donde cada uno tiene una modalidad diferente, siendo la
misma normativa que a todos los rige.
Hemos visto
elecciones y elecciones y leyes y leyes por que al fin la que hacen no acomodan
las exigencias del momento como decir la ley de régimen electoral que establece
para la oferta electoral de 2020-2024 con tres elecciones separadas, ahora han
entendido que sería convertir al país en la expresión musical “El país de las
maravillas, una chercha política”.
Observemos también
que recientemente se anunció un ciclón “Dorian” y los medios de comunicación ya
estaban saturando el país que por una parte es buena las alertas, pero también
cuando se exageran enferman la población, si de esto duda, entienda que con
buena fe se escribe, los huracanes cada tres o cinco años son muy importantes o
necesarios, primero por que lavan las montañas, la germinación de la flora se
extiende, los árboles enfermos son derribados y mueren por completo, las presas
se abastecen de agua y esta generan grandes proporciones a favor de la
población, pero hay otros beneficios mas de los huracanes.
Últimamente
tenemos como escándalo los llamados capos o narcotraficantes, ministerio
público y fuerza pública haciéndole la vida imposible al ciudadano cuando están
presto para dar servicio y viven aunque sean asalariado de esa humilde
población del país, es decir que el caso del señor César Emilio Peralta, a
quien le denominan El Abusador no son cosas nuevas del mundo y si a censurar
los vamos a sacrificar señalémoslos por la vida que le haya quitado a alguien,
pero por su fortuna ilícita ¡Hay hombre! Ahora los vamos a sacrificar cuando de
esa fortuna viven miles y miles, porque la pregunta cabe y estos que han
desmantelado el Estado Dominicano obligando a la población a pagar combustibles
caros, a hacer compras de alimentos carísimos, a no tener una seguridad social más
digna con un servicio a medicina y salud prudentes, porque muchos de los
buitres que han pasado por el Estado se los han llevado los recursos. Seamos
reales y no apsasionados y por último, no son todos los fiscales corruptos, ni
todos policías, pero por Dios esto no es cosa nueva, pero hace tiempo que la DNCD les ponen drogas a aquel
que no le es de simpatía. Despertemos,
hasta otro momento.