
Explicó que el cambio a gas natural del combustible de Punta Catalina generaría
en cinco años un ahorro de 5,650 millones de dólares al país, por los daños del
carbón que serían evitados con la conversión propuesta.
Señaló que si en vez de usar carbón o gas natural, se hubiera invertido el
costo de la construcción de Punta Catalina en energías renovables, los
beneficios se duplicarían a 2,230 millones de dólares al año que proyectados a
cinco años, alcanzarían los 11,150 millones de dólares.
“Cien millones de dólares para la construcción de un gaseoducto desde Los Mina
a Punta Catalina, a 2 millones de dólares por kilómetro, en un trayecto de 50
kilómetros, y entre 200 y 385 millones de dólares para reequipamiento de las
plantas”, detalló Niemi durante una conferencia en la Biblioteca Pedro Mir, de
la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
El experto advirtió que si Punta Catalina es operada con carbón, será imposible
recuperar la inversión.
Manifestó que a corto plazo la generación eléctrica a carbón no será
competitiva, ya que será muy cara frente a la producida a partir de fuentes
renovables y la oferta del carbón como combustible será escasa y alcanzará muy
alto precio.
“Punta Catalina no encontrará carbón en el marcado o si lo consigue, no tendrá
recursos para adquirirlo, es decir que esta termoeléctrica corre el riesgo de
convertirse en un elefante blanco”, dijo.
Afirmó que la conversión a gas natural de Punta Catalina es una necesidad para
salvar la inversión que se ha hecho en esta obra, además de ahorrar grandes
cantidades de dinero por los daños que causará el carbón en la población, en el
medio ambiente, en los sistemas productivos y en las infraestructuras públicas
y privadas.