Santiago.- Un niño de un año y medio murió tras ingerir
aceite de motor quemado que encontró en el patio de su residencia, ubicada en
un sector de Santiago.
Dilan Reynoso Jiménez residía junto a sus padres en la
comunidad Villa Verde. De acuerdo con las versiones, el niño salió a patio y
encontró la botella con el aceite en un taller que está ubicado en la parte
trasera de la casa.
“Según dicen los familiares, la madre notó que el niño no
estaba a su alrededor y corrió a ver dónde estaba, cuando llegó ya el niño
había ingerido el líquido”, explicó uno de los asistentes al velatorio del
menor.
El niño fue descrito como “el príncipe de la casa”, a quién
según sus allegados se le brindaba un cuidado excelente.
Mientras que los parientes aun no entienden cómo el menor
puedo destapar la botella.