
Félix de la
Rosa Ramírez , de 41 años y quien residía en el sector Los
Alcarrizos Americanos, fue ultimado de un de un balazo en la cabeza disparado
por uno de varios desconocidos que lo despojaron de la escopeta con la que
prestaba servicio en un salón de eventos.
Los homicidas sustrajeron, además, un televisor plasma de 52 pulgadas y tres
proyectores que estaban en el techo de dicho establecimiento.
El cadáver fue hallado por un supervisor de la empresa para
la cual trabajaba De la Rosa
Ramírez y una empleada de una cafetería.
El cuerpo fue enviado al Instituto Nacional de Patología
Forense.