Por Luís santiago Sánchez Espinal
Aunque nosotros fuimos un acérrimo
opositor a Balaguer político y al Balaguer Presidente, hoy, que las pasiones
políticas han bajado en intensidad, no le regateo a Elito Balaguer Ricardo, el
mérito bien ganado de haber sido, es y será un referente para las nuevas
generaciones de políticos dominicanos, es decir, Fűrer, (guía en alemán), pero
en especial, para los dos líderes del PLD, porque el ex presidente Fernández se
auto define como el Balaguer Joven, y el actual Presidente Medina es un
adelantado discípulo de Balaguer, en algunos aspectos.
Ante el preocupante estado
de cosas que vive nuestro país el Presidente Medina aprendió y aplica los
famosos postulados de Balaguer, de estar CIEGO, SORDO Y MUDO.
Traigo esto a colación
porque los últimos acontecimientos ocurridos en Haití en contra de nuestra
dignidad como país, han sido soslayados por nuestras autoridades, en especial
por la máxima autoridad del país.
De lo que acabamos de
decir, los ejemplos huelgan: Retención en Haití de camiones de carga, secuestro
de dominicanos, humillación a militares, y el colmo de los colmos es la
delicada situación que aconteció con nuestro personal consular, en el paso
fronterizo de Anse à Pìtres, con Pedernales; y nuestro Presidente
Constitucional ante esos hechos, CIEGO, SORDO Y MUDO.
No somos partidarios de la
violencia, pero sí somos partidarios de repeler las ofensas, y estos hechos de
Anse à Pìtres me trajeron a la memoria el ultraje que hicieron los tonton
macoutes (policía política de Duvalier), a nuestra embajada en Puerto Príncipe
durante el efímero gobierno del Profesor Juan Bosch; pero nuestras autoridades
reaccionaron al instante, y cuando las armas dominicanas estaban listas para
castigar el ultraje; intervino la
OEA y se evitó lo peor. Algo que las nuevas generaciones
desconocen, es que ante la agresión haitiana en 1963, los peloteros dominicanos
de Grandes Ligas, entre ellos, el mejor pitcher del mundo Manico Marichal, se
pusieron al servicio del Presidente Bosch, en caso que fuese necesario. No
somos anti haitianos, pero sí somos dominicanos, y por ende, nuestro país
primero.
Nuestro país se está
cayendo a pedazos en todos los órdenes (con la excepción de la construcción de
aulas), y nuestro Presidente, CIEGO, SORDO Y MUDO; como que na´.. y queridos
lectores, si hacemos un análisis desapasionado y profundo nos damos cuenta, que
nuestra degradación física y moral ha llegado a un grado superlativo, que hasta
instituciones de los poderes fácticos han sido sacudidas por accione
bochornosas, de algunos de sus miembros.
¡Carajo!. Duele hasta la
médula mirar una pala mecánica matando el río Bajabonico, pero para Medio
Ambiente, ná es ná porque nuestro país está bajo el imperio de la impunidad y
el Jefe del Estado está CIEGO, SORDO Y MUDO
