sábado, 1 de febrero de 2014

Observando se aprende



Por el Lic. Eddy Arias Gómez.- Por razón se infiere sobre los cuerpos orgánicos e inorgánicos, forma, tamaño y textura, de donde parte la observación para externar conceptos, pareceres de donde se desprenden las hipótesis de existencia y la presencia de la vida en todo cuerpo natural o artificial.

En el tema anterior nos referíamos a los secretos de la naturaleza, los cuales se observan a través de los sentidos humanos, animal o vegetal.

En los fenómenos naturales intervienen unas fuerzas concéntricas animados (movimientos), inanimados (inerte) pero al fin todo tiene su por qué y para qué.


Se observa el Sistema Solar, el mar en movimiento, las aves en convivencia, la atmósfera y sus componentes, las abejas en sus labores, el brote y nacimiento de las semillas en la tierra, la polinización y floración en plantas y hiervas, el paso de las aguas en estado natural, el fuego que enciende y apaga, las bancadas de energías y las colonias alimenticias y medicinales. Cuando se observa en laboratorios se aprende y se elaboran conceptos falsos y verdaderos.

Todo fenómeno natural se concibe como actuación de la trascendencia divina (Dios) por lo que el ser humano por sus limitaciones y mente variable se ha ido fabricando un Dios para cada elemento natural; visto como fenómenos mágicos de donde se desprende la magia blanca y la magia negra, para hacer el bien y el mal.

Mediante la invocación a espíritus divinos e inmundos se invoca a los dioses de la mentira y al Dios de la verdad mediante recursos naturales (superstición). La naturaleza enseña y los seres vivos aprenden.

Comenzando desde los átomos hasta la masa o cuerpos para la conformación de un universo, mundo visible o invisible ¿Dónde se ubica Ud.? ¿Dónde me ubico Yo? Todos estamos ubicados en diferentes planos, llamados estudios existenciales reales.

Otros viven un vacío existencial, por la inconciencia y claridad de su realidad. Proverbios 21,1-31, Salmo 26,1-13