Maestra Isabel Luna de Gomez |
Por: Lic. Parmenio Paulino Nuesi.- Isabel
Luna fue una destacada educadora e insigne ciudadana, propulsora de la
educación sistémica en la sección Marmolejos del Municipio Los Hidalgos, Puerto
Plata. Nació en San José de Las Matas, provincia Santiago en el año 1903,
fueron sus padres Juan Luna y Dolores López Bisonó.
Contrae matrimonio en Marmolejos con el
señor Leovigildo Gómez, un importante comerciante de la época procedente de
Guayacanes, con quien forma su familia integrada por: Leovigildo Gómez Luna,
Rigoberto Gómez Luna, Osvaldo Gómez Luna, Rafael Erpenio Gómez Luna, Solón Nicolás Gómez
Luna, Fremio Gómez Luna, Rafael Gómez Luna y su hija adoptiva Enna Socorro
Gómez.
Desde pequeña mostró una
aguda inteligencia y deseos de enseñar lo cual motivo a sus padres a inscribirla
en la Escuela Normal ,
institución dedicada a la formación de los futuros maestros y maestras. Era
autodidacta, se entretenía estudiando libros de medicina, pues su primer sueño
fue ser médico.
Llega a
esta comunidad a prestar servicios a la educación primaria, insertándose de
manera inmediata en el año 1928.
Desarrolla sus labores de manera precaria en una enramada construida en
la parte baja de Marmolejos, muy cerca de la vivienda del señor Chucho Sánchez,
la cual fue levantada a solicitud de los principales moradores, entre estos:
Don Félix Zarzuela, Agustín Sánchez, Carlos Merced, Carlito Pérez, José
Castillo, Leovigildo Gómez, Mariquita La paz y Ramona Díaz, entre otros.
En el
año 1931 por esfuerzo de los comunitarios se construye una pequeña escuela en
el centro de la comunidad, posteriormente reconstruida y ampliada a raíz
del crecimiento de la matricula estudiantil.
Sus estrategias de
enseñanza-aprendizaje, como educadora del nivel primario se fundamentaban sobre
un enfoque teórico-práctico, ayudando a sus estudiantes aprender de manera
significativa y amena los contenidos propuestos para afianzar su desarrollo
individual, articulado así su abnegada pasión en las tareas.
La
maestra Isabel, no solo se limitaba a la implementación de las estrategias en
el campo educativo, también puso en práctica sus conocimientos como auxiliar de
salud para dar servicios humanitarios a enfermos de la comunidad, su
participación era muy activa como consejera comunitaria. Era muy común
solicitar sus consejos sobre algunos temas de interés familiar, llevando
mensajes positivos y de gran valor humano.
Realizaba
excelentes labores de bordados, convirtiéndolos en una exquisita obra de arte,
beneficiando con sus enseñanzas a muchas de sus alumnas que posteriormente se
dedicaron a cultivarlo como oficio para obtener ingresos y dedicarlos a la
familia.
Durante
varios años residió en esta comunidad en una vivienda cuyos terrenos hoy los
ocupa el templo de la iglesia evangélica, porción que fue donada a la
congregación cristiana por sus descendientes.
Enfermo de diabetes aguda,
muy joven, se traslado a la ciudad de Santo Domingo y allí falleció a la edad
de cincuenta y cuatro años, el 18 de noviembre de 1957. Sus restos se
encuentran sepultados en el cementerio de la avenida Máximo Gómez.
A pesar de su partida
física a destiempo, su legado sigue y seguirá vivo entre nosotros. Por su
desempeño y entrega como maestra ejemplar, formadora e hija meritoria de la
comunidad, a Isabel Luna de Gómez se le honra designando con su nombre la
escuela creada bajo su coordinación en el año 1928.-