Por: Lic. Parmenio Paulino Nuesi.-
El presidente Luis Abinader y los ex presidentes Danilo Medina, Hipólito
Mejía y Leonel Fernández, recibieron esta misma semana el informe presentado por
el Consejo Económico y Social (CES), sobre la crisis haitiana, donde se sugiere
buscar una salida a la mano de obra de indocumentados.-
A raíz de este informe, ciudadanos dominicanos
y organizaciones patrióticas se mantienen en alerta ante la preocupación de que las autoridades procedan a regularizar
haitianos sin reunir las condiciones de ley.-
Sin embargo, la constitución
dominicana establece claramente los requisitos y procedimientos para la
admisión de extranjeros en el país, los cuales no son elegibles para una
regularización masiva.-
En cuanto a la ley general de migración,
esta prohíbe la regularización de extranjeros indocumentados que hayan ingresado al país de manera
ilegal o que no cumplan con los requisitos de residencia.-
La regularización de la mano de obra
haitiana en la República Dominicana especialmente de aquellos trabajadores, sin
identificación registrada en su país de origen, representa una violación a la
Constitución y las leyes dominicanas, y un grave atentado a nuestra soberanía.-
Es importante observar con cautela la propuesta de los empresarios agrícolas y de la construcción que promueven regularizar masivamente la mano de obra de indocumentados para su conveniencia, lo que debe ser rechazado por la sociedad dominicana, ya que generaría indefectiblemente una serie de problemas sociales y económicos, como la competencia desleal, la explotación laboral, la sobrecarga de los servicios públicos y el aumento de la inseguridad.-
Es necesario buscar soluciones
alternativas para que se respete la constitución y las leyes dominicanas, como
la creación de programas de migración temporal o la cooperación con el gobierno
haitiano para la identificación y documentación de sus ciudadanos.-