Santo
Domingo.- La muerte del dirigente del Frente Amplio de Lucha Popular
(FALPO), Mario Vladimir Lantigua Baldera, ocurrida el 1 de agosto del pasado
año en San Francisco de Macorís, durante una huelga convocada por
organizaciones populares, se produjo por un disparo de arma de fuego realizado
con una escopeta de fabricación cacera, el cual le penetró por el ojo
izquierdo, sin orificio de salida.
La
información fue ofrecida en una rueda de prensa encabezada por la comisión
investigadora del Ministerio Público y la Policía Nacional, integrada por el procurador general
de corte adscrito a la Dirección General Persecución del Ministerio Público,
magistrado Fernando Quezada García; el fiscal titular de la provincia Duarte,
Regis Reyes; el director de Asuntos Internos de la Policía, general Héctor
García Cuevas, y el inspector general del organismo policial, Rafael A. Cabrera
Sarita, quienes estuvieron acompañados de oficiales policiales que participaron
en la investigación, así como del médico forense Winston Benítez, de
la Regional Nordeste del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), y
del encargado de Balística de esa entidad, José Corniel.
Durante
el encuentro con los medios de comunicación, las autoridades ofrecieron un
detalle pormenorizado de los hallazgos obtenidos en el transcurso de las
indagatorias, utilizando diferentes técnicas de investigación, entre ellas,
pruebas de balística y de absorción atómica del cadáver.
Con
relación a este caso, se informó que acogiendo las recomendaciones de
dicha comisión, el Ministerio Público continuará las investigaciones del caso
hasta obtener nuevas evidencias, que en forma irrefutable, sustenten algún
sometimiento ante los tribunales.