lunes, 20 de marzo de 2017

“Volviendo a los lobos….”

Por el Doctor José Pérez

En relación al artículo “Píldoras Suaves con Sabor Histórico”,que escribiera para El Ranchero Digital en el mes de Octubre,2016, yo he decidido recalcar algunas puntualizaciones, lo que pienso podría ayudar a edificar y aclarar la principal idea ,y, al mismo tiempo, contribuir  a ilustrar y expandir los puntos principales. Yo entiendo que el tópico tiene gran preponderancia,   y quizás podría aportar algunas ideas en el proceso de la liberación de nuestro país, particularmente en el sentido de alejarse lo más posible del pantano corrupto de ciertas abominables influencias.¡Estimulando, para que la chispa coja brío!

Primero, permítanme recordarles, y esto debía ser sabido hasta “ por los mamandos”, que en la República Dominicana hay algunas familias, llamadas familias añejas, que siempre han pensado que ellos son los propietarios del país, los dueños que pueden disponer de nuestras vidas a su antojo. Muchas veces uno se llega a preguntar el porqué,¿Qué les permite a ellos pensar de esa manera? ¿Qué les concede el privilegio de vivir aquí, disfrutar la agradable vida del país, vivir en la abundancia  y nunca hacer algo por contribuir al desarrollo del país? Es como si ellos pensaran:  “Ya comió mi familia, comió el dominicano” Hasta ahí llega su egoísmo. La gran secreta verdad al descubierto es: Ellos no quieren que el país avance.¡Extraños dominicanos que, viviendo en el suelo dominicano, nunca han sufrido lo que ha sufrido el dominicano!

Es que todos ellos son mañosos, con malas mañas aprendidas desde los tiempos coloniales.  Mañosamente se apoderaron de los mejores terrenos del país; ingeniosamente estableciendo los diabólicos ingenios, que prosperaron con el ensangrentado sudor de los infelices trabajadores, que morían debido a la anemia, la desnutrición, la tuberculosis y el mal trato, ingenuamente sin comprender, desde que ellos trabajaban pero nunca la saboreaban, cuál era el ingenio del tal ingenioso negocio, que tan ingeniosamente les dejaba enormes  riquezas a los amos, que se las ingeniaban para andar por el mundo exhibiendo y disfrutando esa opulencia.¡Los pajuiles se odian las patas, al vérselas!


Desde tempranos días, esas poderosas familias lograron que les crecieran las garras, para así aferrarse al control del aparato gubernamental de la Colonia, control que lograron mantener al nacimiento de la República, la que nunca ha conseguido deshacerse de sus devoradores mordiscos. Ellos siempre han sido los protagonistas que escogen a los que van a tener el fuete en la mano, para subyugar al dominicano. Ello nunca se ha oído de tal cosa como la policía entrándoles  a palos y a macanazos a los miembros de la Asociación de Ganaderos, a los miembros de la Asociación de Industria y Comercio, los miembros del llamado Club Rotario u otros grupos donde se amontonan esos tutumpotes poderosos.¡Ni en sueños!

Esas privilegiadas familias enviaron sus hijos a estudiar fuera del país, ya fuera a la vieja Europa, o a Estados Unidos, de donde la mayoría, después de someterse al proceso de adquirir una mentalidad conservadora, regresaban al territorio nacional para continuar la dinastía familiar, mostrando el desprecio por el dominicano regular, al que siempre han visto como un naboria. Igualmente, de manera avivata, matricularon los hijos en las academias militares extranjeras, para que les lavaran el cerebro, mirando al dominicano oblicuamente como un extraño, como una cucaracha que hay que pisotear y maltratar, cuando regresan con la frente muy en alto, vestidos con extraños uniformes.¡El humilde vale Chepe, vive una vida inconforme, manda su hijo a la escuela, y no halla la manera de comprarle el uniforme!

Nuestras predilectas familias, de la misma manera se las ingeniaron para apoderarse de las gobernaciones de las provincias, lo que les permitió acaparar los productos, controlar el tráfico ilegal y manejar los negocios sucios. Su influencia y mentalidad se han sentido por siglos en la vida dominicana, donde ellos pululan como víboras.Por medio de la usura, la explotación y la avaricia, crearon y aprendieron a manejar los bancos, el negocio más sucio de que se tiene memoria, no tanto por lo que se sabe de ellos, pero por lo que no se sabe.¡Codicioso mercader, sólo piensa en su talega, y qué le puede meter! 

Estas aventajadas familias apoyaron, y tuvieron una excelente relación con la horrorosa dictadura de Francisco Franco, uno de los sujetos más nocivos que se han conocido, entre otras suciesas porque aún siendo nieto de judíos, fue capaz de aliarse al Adolfo Hitler de  Alemania para que le ayudara a acabar con los comunistas de España, asesinando millones. Se apoderó “del santo y la limosna” de los cándidos españoles, dándoles garrote por 40 años y perversamente torciéndoles más el futuro con la re institución de la odiosa y atrasada monarquía.¡Infernal mentalidad, de un hombre sin dignidad!

 Las arrogantes familias de nuestro cuento, desde hace mucho tiempo se han dedicado a traer  y mantener en nuestro país a una serie de elementos que vienen a la República Dominicana con  vestidura de profesores, dando clases en los institutos de los ricos y en las universidades. Ellos vienen dándoselas de periodistas e intelectuales, escribiendo mentiras en la prensa, en las revistas y hablando basura en los programas televisivos, pues de hablar y escribir inmundicia sí que son maestros. Pero estos individuos  realmente no son profesores, la mayoría son monstruos blancos violadores, enviados con el bien planificado propósito de mantener la casa en orden, y de ayudar a aquellas familias en la tarea de controlar, intrigar, espiar e infiltrar los sindicatos y partidos políticos.¡Explotando la admiración que el dominicano siente por el europeo!

Esa parvada de sujetos traídos para esos designios no viven en la “parte atrás” en las barriadas de las ciudades dominicanas, ni viven cerca de la partes bajas, donde algunas cloacas todavía salen, a veces infectando el río Ozama, ni viven donde las moscas abundan y los mosquitos jibisan a la población. Ellos viven en otro tipo de guaridas, con dóciles sirvientes; durmiendo en blancas sábanas, comiendo carne todos los días; con buenos cheques, viajando cuando desean con visas de entrada y salida, moviéndose libremente y sin alguien que se encargue de vigilarlos. En pocas palabras, ellos se dan la gran vida en ese maravilloso paraíso que es la isla de Quisqueya. ¡Forasteros que llegan allá, dejan el veneno y a veces se van!

En el año 1965,cuando a cierto punto se observó que los levantados que pedían la vuelta a la Constitución, tenían la posibilidad de ganar, y la población de los pobres se tiró a las calles, los miembros de las tramposas familias fueron los individuos que salieron de sus madrigueras, temerosos, llorando como si hubieran sido niños, y corrieron temblando a rogarle a la embajada de los Estados Unidos que por favor invadiera el país, porque ellos tenían miedo de que los comunistas se apoderaran del poder. Claro, ese no era su país, ellos nunca han sacrificado nada, los muy pillos, ellos no fueron los que sufrieron la vergüenza de que vinieran los que se creen dueños del mundo y hollaran el territorio nacional por segunda vez.¡Habría que ser muy mordaz, para tener tal bajeza!

Aunque todavía era un jovencito, yo puedo recordar el sentimiento de repugnancia e indignación de los dominicanos, cuando en los periódicos aparecían las fotos de las hijas de esas famosas familias, haciéndoles  la vida más “placentera” a los invasores. Esas rancias familias viven parasitando, controlando la prensa, hablando mentiras y complacidos mirando al dominicano en la pobreza, jugando la lotería y produciéndoles riquezas a las casas de licor, viviendo en el atraso, creyendo en supersticiones y comprando armas.¡Los caballeros borrachos, se caen de los caballos!

Nadie que tenga tres dedos de frente podría decir que Francisco Caamaño era un revolucionario. Caamaño era un militar perteneciente a una familia militarista latifundista y entrenado en las mismas escuelas donde fabrican los monstruos, pero el hombre era un nacionalista, popular, carismático, respetuoso y que parecía que tenía buenas intenciones para con el país y las corrientes democráticas. Esas eran unas cualidades que, agregadas al anhelo de justicia de las amplias masas populares, que habían sufrido la burla de que los lobos apoyados por extranjeros les tumbaran un gobierno que ellos habían elegido para conseguir un respiro, después de la horrenda dictadura, podía cambiar los destinos del país, y evitarle angustias innecesarias y largos años de engaño, represión y traición, lo que  nadie podría negar, pues sólo habría que decirle que voltee la cara y les de una mirada a  los últimos cincuenta años, si se quiere convencer.¡Que la ceguera más grande, es del que no quiere ver!

En el 1973, cuando Caamaño desembarcó por Playa Caracoles, todos los jóvenes del país sufrimos en carne propia las persecuciones de los lobos. En esos días yo estaba en la escuela de medicina de la Universidad Autónoma de Santo Domingo(UASD), pero algunos fines de semana  iba a pasármelos a El Mamey, donde a menudo los jóvenes progresistas de aquella localidad celebrábamos algunas actividades comunitarias. Pues ese fín de semana, coincidencialmente, volvió Francisco Caamaño, y cientos de jóvenes fuimos detenidos y trasladados a la fortaleza de la ciudad de Puerto Plata.¡Allá se llevan los presos, después se inventa el delito!

Para decir la verdad, todos esos jóvenes de El Mamey, Ranchete, Luperón, Altamira, Imbert, la ciudad de Puerto Plata, y otras localidades, nos pasamos 4 o 5 días en las rejas. Nadie nos entrevistó, nadie nos torturó, nadie nos habló, nadie nos interrogó, nadie nos maltrató. Todo eso haciendo el caso más ridículo. Después que el hipócrita santurrón, hijo adoptivo de los norteamericanos, Joaquín Balaguer, dio la orden de que asesinaran al pobre Caamaño, en el paraje Nizaíto, sección de La Horma, en San José de Ocoa, el día 16 de Febrero del año 1973, todos fuimos despachados para nuestros respectivos lugares.¡Ya los lobos podían respirar tranquilos!

Todo fue una artimaña para proteger a los lobos, que estaban “muertos del miedo”. Para tratar de aterrorizar y molestar a todos esos jóvenes progresistas. Para darles dolor de cabeza a las familias  de esos jóvenes dominicanos. Actitud cobarde y ruin de aquellas autoridades, que en vez de ayudar y proteger a la gente, prefirieron plegarse ante los lobos con dientes ensangrentados. Pero,  ¿protegerlos contra qué? ¿Qué hacían los jóvenes en esas comunidades? Ser diferentes. Esto es algo que los lobos no pueden tragar. Ellos odian a muerte que los jóvenes lean y estudien. Ellos aborrecen que los jóvenes hablen diferente. Ellos son enemigos de que los jóvenes se opongan a los vicios de su sociedad burguesa, como fumar, beber alcohol, usar drogas, etc. Los lobos quieren  tener la sociedad entera dentro de su caracol. ¡Y que no se atreva alguno a salirse del chiquero!    

Nadie podría decir que el Julio Cesar Chávez de Venezuela era un revolucionario, pero el hombre poseía algunas cualidades que eran positivas para la población pobre de Venezuela, engatusada por tan largo; él no robaba, era un nacionalista, quería usar los beneficios de los hidrocarburos para ayudar a la educación, la salud pública, los aeropuertos, el avance científico y tecnológico, los ancianos retirados, autopistas y viviendas donde vivir decentemente, etc. Chávez se paró con los puños apretados y dijo:  ! Ya es suficiente!  ! Con vergüenza y dignidad vamos a enfrentar a los que hasta hoy nos han robado, despreciado, y nos han mantenido en el atraso!¡Ahí está el ejemplo a seguir!

Los lobos embusteros de Venezuela le tenían tirria al hombre porque él gobernaba distinto, hablaba y actuaba diferente a los tradicionales corruptos que habían mantenido a su país hundido en la pobreza y el atraso. El no era un criminal. El no creó una policía vulgar que atroz y cobardemente  le diera palos y maltratos a la gente. Los lobos odiaban a Chávez. Los traídos por los lobos venezolanos, que vinieron como periodistas, como profesores de los institutos de los  ricos, de las universidades y las  escuelas, y que tenían programas en las televisiones de Venezuela detestaban a Chávez. ¡Le tenían tanto rencor, que no lo podían pasar!

Si en algún momento llegara un gobierno a la República Dominicana que se dispusiera a regular la ingesta de alcohol en el país; desde una determinada fecha, en todo el territorio nacional, se prohibiría terminantemente la venta de alcohol en días de semana. La venta sólo se podría efectuar en fines de semana y en días feriados. Ustedes pueden estar seguros que los lobos van a salir de sus madrigueras y van a tratar de tumbar el gobierno, porque ellos quieren que los dominicanos se mantengan embriagados y durmiendo la resaca, para así esos detestables lobos seguir controlando el país y haciendo dinero en el mar de corrupción, sin importarles que se destruyan miles de familias dominicanas.¡Ya conozco por el tufo, que estaba empinando el codo!

Si un día viniera un gobierno y ordenara por decreto, la decisión de abolir definitivamente la lotería nacional, las bancas y las apuestas, porque hasta hoy no han dado resultados positivos para la mayoría de la población, sino que lo que ha hecho tal lotería es enriquecer a una manada de lobos banqueros, y mercaderes que han vivido la gran vida alimentándose de la miseria del dominicano y “quitándole la sopa al tísico,” los lobos van a protestar porque ellos  maliciosamente prefieren que se juegue y se apueste con la esperanza del dominicano, el cual ha sido engañado por tantos años, en lugar de darles trabajo para que se ganen el sustento de sus familias sana y honradamente.¡Si no hubiera lotería, la población viviría con mucho más alegría, y todo ese dinerito, en sus bolsillitos se quedaría, y los lobos galipotes no podrían colectarlo como dinerote en sus bolsillotes!

En mi artículo “Hablemos de los Monstruos” que yo escribiera para el Ranchero Digital en Febrero 2016,yo expresé que a nosotros los dominicanos, malvadamente nos han hecho pensar que nuestro destino esta aliado y mancomunado al de España. Esto es totalmente ridículo. España nunca le ha dejado beneficios a la República Dominicana, ni lo hizo en época de los más de cien mezquinos gobernantes cuando la época colonial, ni tampoco lo han hecho después del establecimiento de la República. Incluso, España y Portugal son los países mas atrasados de Europa, todavía vergonzosamente manteniendo a la población viviendo como en los tiempos semifeudales, manteniendo una parasítica aristocracia que brilla por lo corrupta y deshonesta. Como dicen los mismos españoles, cuando protestan por el ahogamiento económico y la pobreza, en las calles de las ciudades ¡Pero qué alteza, con tanta bajeza!

A propósito de aristocracia, déjenme decirles que en toda la larga historia del humano, nunca ha existido un rey que se pueda llamar bueno. Esto es totalmente imposible. Esto iría en contra de la razón y la lógica. Hasta las bacterias, los buitres y las hienas juegan un papel positivo en el planeta tierra, un papel de limpieza del medio ambiente; pero esos reyes, príncipes, emperadores, zares o como quiera que les llame, han sido una manada de cochinos que han vivido como sanguijuelas, chupando la sangre hasta el tuétano a las empobrecidas, ignorantes y engañadas poblaciones del mundo.¡Viviendo sin trabajar, partida de forajidos!

Nosotros no necesitamos la influencia de España, ni sus mañosas maneras. Nosotros no tenemos que usar los murciélagos que nos mandan de allá. España nunca fue un ejemplo a ser seguido, ni es un ejemplo para seguir hoy, sumida en el atraso, las supersticiones, el tráfico de drogas, bajo el dominio de las bases militares extranjeras, y el horrendo control de la pantanosa aristocracia. Y nadie podría decir que hay algo malo en la relación de un país con otro, pero eso sería cuando trataran al otro país con respeto y en igualdad de condiciones, no cuando tratan de mantener a uno como un museo para exhibir un espantoso negro pasado, que nadie quiere recordar.¡Oh no, señor  Bobadilla, yo prefiero la otra orilla!

Y si ya, al final de la discusión, pudiera haber alguien muy alicantino que argumentara:”pero Dr. Perez, si no fuera por esos españoles, nuestra raza mulata no existiera.” Esto es cierto, y también que sólo una minoría de nuestra población cuenta con el genotipo de ellos, lo que nos hace bastante diferentes.

Como dijo el salteador, cuando lo andaban buscando:
“Para estar emparentado a una rata sin conciencia
como Nicolás de Ovando, yo me mantengo solito,
comiendo lo que aparezca, viviendo en el otro bando.”